¿Corresponden las huellas con los detenidos del Caso Sicilia?

Una de las mayores movilizaciones en la Historia de Cuernavaca, motivada por el segundo crimen masivo por asfixia en menos de un año

C. Felipe Calderón Hinojosa
Presidente de México

Señor Presidente

Creo que la sociedad mexicana no le tomará a bien su viaje al Vaticano a la beatificación de Juan Pablo Segundo, cuando hay tantos pendientes en México: Le recuerdo que  Juan Francisco Sicilia Ortega y otras seis personas fueron asfixiadas y sus cuerpos abandonados en un automovil marca Honda.

La Secretaría de la Defensa Nacional ha presentado a uno de los presuntos responsables. La pregunta que urge responda su vocero de asuntos de seguridad nacional es si las huellas digitales encontradas en el auto, corresponden en alguno de los casos a las del detenido presentado como presunto responsable, sin más pruebas que una confesión presuntamente arrancada a golpes. ¿Tendrán alguna prueba más contundente con los gadgets estilo Jack Bauer con los que cuentan en la AFI?

Cuesta trabajo encontrar los nombres de las otras personas que fueron víctimas de este hecho. En un principio se hablaba de una mujer y después ya nada se dijo al respecto. Pero además hay antecedentes de un crimen múltiple similar que no ha sido investigado.

El 14 de abril de 2010 el Sol de Cuernavaca reportó el asesinato de otros seis muchachos, víctimas de estrangulamiento. TuvIeron en común estar en la misma cancha de futbol. Reproduzco la información al respecto

Alrededor del medio día, familiares de las víctimas identificaron a: Víctor Manuel González López de 15 años de edad, ocupación peón de albañil; Arturo Leonel Corona García de 20, vendedor de ropa de 20 años de edad; Gilberto Jaimes Lara de 16 años, peón de albañil; Emmanuel Uribe Candia de 18 años de edad, peón de albañil; Mario Reza Sotelo de 21 años, peón de albañil y Carlos Alberto Navarro García de 17 años de edad, de oficio ayudante de electricista, todos ellos vecinos del municipio de Emiliano Zapata.

Juan Francisco Sicilia Ortega es un nombre notable por ser hijo de un periodista valiente, pero no es la única víctima. Que la atencion que la Presidencia de la República se ha vuelto obligada a poner en este caso, sirva para que no quede en la impunidad ese otro.

No le pido que le mande mis saludos al cardenal Ratzinger porque creo que hay asuntos más urgentes que reclaman la atención de los mexicanos. Esperamos que en la Semana Mayor no haya descanso para las autoridades encargadas de la procuración de justicia.

Ramsés Ancira
Reportero Investigador