Carmen se equivocó, Calderón y MVS la necesitan

Ramsés Ancira

Si alguien dice que Beatriz es lesbiana y Mario y  Emilio pederastas, cualquiera medianamente enterado sabrá de quien se habla aunque no se mencione al Partido ni el apellido. Difama que algo queda es una frase de la sabiduría popular que aplica perfectamene para este caso.

No importa cuantas veces se haya repetido en las redes sociales la versión de un rumor, ni tampoco la veracidad de los tes de toloache que Martha le dio a Vicente. No valdrá escudarse en que no se mencionan los apellidos y que "si les viene el saco que se lo pongan". Un comunicador tiene que darse cuenta del alcance de sus actos y darle al afectado la oportunidad de la defensa o el pataleo.

Ignoro quien en Los Pinos redactó la carta que pidieron que leyera Carmen Aristegui y los términos de esta. Casi estoy seguro que no se la consultaron al Presidente y es tan pobre el nivel de comunicación de la Presidencia de la República Mexicana que no dudo que pueda haber sido un esperpento. Esto no quita la obligación de dar a conocer todas las voces. En eso consiste el periodismo de verdad, no el panfletario.

En 1991 se transmitió por primera vez en vivo un fraude electoral, desde Chimalhuacan, a través de Stereo 100. Dimos a conocer las placas de al menos cinco camiones en los que viajaban docenas de personas y las direcciones de las casillas electorales y como  los pasajeros se llenaban los puños con docenas de credenciales electorales.

La Secretaría de Gobernación, encabezada por Fernando Gutiérrez Barrios prohibió que se diera la noticia. José Cárdenas los ignoró y la repitió cada hora en cada especial informativo.

Al día siguiente Juan Maldonado Pereda, el operador del fraude se presentó tan campante en Darwin 68, donde se encontraba la cabina de radio Dijo que el PRI había tenido que alquilar los camiones para servicio de los votantes "porque las casillas estaban muy retiradas", negó que hubieran votado menores de edad. No dijo tampoco que a cambio de su acción, Guadalupe Buendía "La Loba", les había prometido regularizar sus tierras.

Tras haber escapado de un intento de linchamiento y después de la golpiza que le propinaron las huestes de La Loba a la periodista Julieta Medina, escuché  las mentiras de Maldonado Pereda en el segundo noticiario con más rating del país, sólo superado por el de Gutiérrez Vivó. Me hubiera gustado estrangularlo.... Lo que podía hacer era desmentirlo. Llame a la cabina, me contestó Carlos Urdiales que coordinaba el noticiario. "Dice Pepe que nosotros ya tuvimos la oportunidad, debemos dejarlos defenderse".

Finalmente  pude salir al aire y con menos pasión de la que hubiera querido intenté desmentir a Maldonado Pereda. Se salió con la suya, el fraude se consumó, pero el periodismo cumplió su misión, todos pudieron dar la versión de los hechos.

No hay mejor instrumento de la democracia que la información. Si Luis Telles, el hombre que bloqueó la renovación de las concesiones de MVS no hubiera sido exhibiido por Purificación Carpinteyro y Carmen Aristegui, lo más probable es que el resultado de las elecciones en Guerrero y Baja California Sur, hoy sería distinto.

Emilio Gamboa Patrón, el hombre que controla las comunicaciones en México es el más beneficiado con la salida del aire de Carmen Aristegui. El PRI se beneficia más que nadie del error. Ya disfruta de la cancelación de CNI-Canal 40 y de Monitor. Ciro Gmez Leyva hace tiempo tiene bien definido el bando para el que opera.

La presidencia de la República se deslindó de una pésima manera, con una  funcionaria de segunda.

Es urgente que el gobierno de la Repúblcia opere con eficacia y resuelva esta situación, ya no es un asunto entre particulares, sino de seguridad nacional y del que dependen las elecciones por venir en el 2011 y el 2012.

Lo que está en juego ya no es un espacio de información, sino que en todas las redes sociales del mundo se repita cuáles fueron las causas por las que una conductora fue suspendida. No se hablará de la soberbia y ninguneo a los reporteros, de la falta de colaboración y sentido de equipo de Carmen Aristegui.

Más bien se preguntarán si Calderón no sufre de la misma enfermedad que George Bush junior y si los juegos de guerra de ambos no tienen un  mismo orígen patológico.

Comentarios

  1. Mejor tono. Pero, no incurres en lo mismo que atacas cuando llamas a Bush junior borracho, lo que de hecho es un rumor. ¿Cómo sabes que la consecuencia de beber es hacer guerras? Entiendo de licencias en artículos de opinión, pero por mucho menos de lo que dices tú, censuras a Aristegui. Coincido en todo el resto. Sólo que una cosa es que se les de espacio a los agraviados para defenderse, y otra muy distinta es pedir una disculpa en una carta redactada desde la oficina donde despachan en Los Pinos.

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  2. Fijate que jamas emplee el término borracho. Tu lo inferiste. Por otra parte preciso, yo no creo que Carmen Aristegui se haya equivocado por no dar una disculpa, sino por dar espacio a Fernandez Noroña diciendo cosas que no le constan, que son rumores pero que son muy graves. Lo que dice la clausula de conciencia es que un comunicador debe decir, "me piden que lea esto, lo hago porque mi contrato me obliga, pero no estoy de acuerdo con el contenido",

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