¿Por qué pedir la renuncia del Secretario de la Defensa Nacional?
En estos días en las montañas de Guerrero una nueva ola de violencia provoca que todos los días cientos de niños queden huérfanos y docenas de mujeres viudas. El Estado Mexicano no tiene control sobre la zona donde se encuentra el municipio de Tehuehuetla, y otros de tierra caliente y la alta montaña donde las bandas de La Familia, Guerreros Unidos, Rojos y otras se disputan terrenos para la siembra de amapola.
Como sucedió en Ayotzinapa y en Tlatlaya, bajo la titularidad de Salvador Cienfuegos, es evidente la participación de militares, pero lo único que tenemos del titular del la Secretaría de la Defensa Nacional es juramentos de lealtad al presidente y al gobierno, pero no a México ni a los mexicanos. No tenemos ninguna noticia de investigaciones serias que puedan revelar quienes son los militares involucrados.
No es una acusación a la institución, pero esta tampoco hace nada por ganarse la confianza más allá de las declaraciones en conmemoraciones patrióticas.Ante la debilidad e ineficacia del gobierno de Guerrero y la inutilidad de los legisladores de esa entidad, el Ejército es la única institución que podría poner fin al problema de los desplazados, pero a pesar de que Salvador Cienfuegos tiene la información y los medios para actuar, no le interesa o no puede con la dificultad de su encargo por lo que debe ser removido
Aquí tiene Cienfuegos parte de la información que necesita http://www.josecardenas.com.mx/contenido.php?apa=12&idart=60821
Mientras el Ejército ha custodiado fuera de la montaña a algunas de las víudas y huérfanos de la masacre que se comete por estos días, también es cierto que su única utilidad es para ir a enterrar a los muertos, no para dar paz a la región. No es que la renuncia de Cienfuegos vaya a resolver la situación, pero su remoción al menos será prueba del hartazgo de los ciudadanos a seis meses de impunidad también en el caso de Ayotzinapa, donde no existe una sola prueba, un sólo elemento que permita conocer no sólo que pasó con los 43, sino con el asesinato de sacerdotes católicos como el sacerdote Ascención, cuyo criminal ha sido identificado con el nombre de Agustín Acosta Urióstegui, y cientos de habitantes de la montaña, la mayoría de los cuales son anónimos.
Si te indigna la falta de acción, si quieres frenar a tiempo el desplazamiento forzado de las montañas de Guerrero, te invito a sumarte a esta acción y a compartirla: https://secure.avaaz.org/es/petition/Enrique_Pena_Nieto_presidente_de_Mexico_Exija_la_renuncia_del_Secretario_de_la_Defensa_Nacional_por_Inepto/
Como sucedió en Ayotzinapa y en Tlatlaya, bajo la titularidad de Salvador Cienfuegos, es evidente la participación de militares, pero lo único que tenemos del titular del la Secretaría de la Defensa Nacional es juramentos de lealtad al presidente y al gobierno, pero no a México ni a los mexicanos. No tenemos ninguna noticia de investigaciones serias que puedan revelar quienes son los militares involucrados.
No es una acusación a la institución, pero esta tampoco hace nada por ganarse la confianza más allá de las declaraciones en conmemoraciones patrióticas.Ante la debilidad e ineficacia del gobierno de Guerrero y la inutilidad de los legisladores de esa entidad, el Ejército es la única institución que podría poner fin al problema de los desplazados, pero a pesar de que Salvador Cienfuegos tiene la información y los medios para actuar, no le interesa o no puede con la dificultad de su encargo por lo que debe ser removido
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| Lupe una de las 10 víctimas diarias asesinadas por Guerreros Unidos en las montañas de Tehuehuetla, Guerrero. Le gustaba componer corridos festivos, le mataron por negarse a sembrar amapola. |
Mientras el Ejército ha custodiado fuera de la montaña a algunas de las víudas y huérfanos de la masacre que se comete por estos días, también es cierto que su única utilidad es para ir a enterrar a los muertos, no para dar paz a la región. No es que la renuncia de Cienfuegos vaya a resolver la situación, pero su remoción al menos será prueba del hartazgo de los ciudadanos a seis meses de impunidad también en el caso de Ayotzinapa, donde no existe una sola prueba, un sólo elemento que permita conocer no sólo que pasó con los 43, sino con el asesinato de sacerdotes católicos como el sacerdote Ascención, cuyo criminal ha sido identificado con el nombre de Agustín Acosta Urióstegui, y cientos de habitantes de la montaña, la mayoría de los cuales son anónimos.
Si te indigna la falta de acción, si quieres frenar a tiempo el desplazamiento forzado de las montañas de Guerrero, te invito a sumarte a esta acción y a compartirla: https://secure.avaaz.org/es/petition/Enrique_Pena_Nieto_presidente_de_Mexico_Exija_la_renuncia_del_Secretario_de_la_Defensa_Nacional_por_Inepto/
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