De la jotería de AMLO y cosas peores

La obsesión de Andrés Manuel López Obrador por la presidencia de la República está llegando demasiado lejos. Al sentir que Marcelo Ebrard representa un obstáculo para su proyecto y aprovechándose de la leyenda negra de "los chuchos" que el mismo forjó ahora negocia con Enrique Peña Nieto para perder a sabiendas la elección del Estado de México mandando a la derrota a Alejandro Encinas.

No es la primera vez que López Obrador comete errores y luego culpa a "los chuchos" de su fracaso. En el 2006 bloqueó a todos los representantes de casillas que Jesus Ortega le propuso. El día de la elección los maestros comisionados por el SNTE tuvieron manga ancha para anular todas las boletas que al doblarse dejaban una marca del crayón sobre el partido adyacente. Estas fueron suficientes para la derrota de la izquierda, que estuvo apoyada por la campaña del voto en blanco en la que se aliaron, tal vez sin saberlo,Yunque y presuntos progres de izquierda

En el cálculo de López Obrador, si el PRD pierde el Estado de México anula a Marcelo Ebrard y al PAN para enfrentarse solo. No sabe, o hace como que no sabe, de la cercanísima relación del nuevo secretario particular de Felipe Calderón Hinojosa con Josefina Vázquez Mota. En su protagonismo, López Obrador cree que con 30 millones de afiliados a su movimiento ya está seguro de ganar en el 2012 por amplio margen pero le tiene màs miedo a Ebrard que a Peña Nieto y primero quiere deshacerse del ahora jefe de gobierno.

Un candidato ciudadano, con el respaldo de organizaciones sociales, de la UNAM, o por lo menos de quienes ahí han obtenido doctorados es algo que verdaderamente seria invencible para Peña Nieto, pero también para el rústico López Obrador.

El doctor Juan Ramón de la Fuente, tan cercano a Ebrard, que ha defendido el presupuesto de la Ciudad de Mèxico, sin tantas redes ciudadanas ni recorridos por pueblos tendrìa asegurado el voto de la izquierda ilustrada y de gran parte de los panistas. Sea él o no el candidato en 2012, su perfil ciudadano es a lo que teme el PRD de López Obrador, quien cree que si ahora se pierde el Estado de Mèxico, tendrá posibilidades de competir en el 2012.

Travestismo polìtico que rebasa toda moral en un país como México, con más violencia y muertes de civiles que las que se producen en Afganistan e Irak y toda nación ocupada.

Porfirio Muñoz Ledo, con graves problemas de alcoholismo, Andrés Manuel López Obrador con una soberbia patológica y un sector del PRI, en su legitimo derecho están operando para que el PRD pierda el Estado de Mèxico y llevarse de paso unos cientos de millones de pesos de prerrogativas que AMLO quiere usar para su campaña del 2012.

Aun más. Si se realizara un plebiscito en el Estado de Mèxico entre Encinas que quiere ir sólo con la "izquierda" porque así se lo pidió AMLO y un candidato ciudadano postulado por la sociedad civil con los registros del PRD y el PAN, el PRI utilizara toda su maquinaria para votar por Encinas porque sabe que el ya está derrotado, pero un candidato ciudadano es una incógnita que no tendrían tiempo de descifrar.

México ya no está para joterías políticas ni para soberbias. Tomemos acción ya

Cordialmente
Ramsés Ancira
Coordinadora Mexicana de Periodistas en solidaridad con Wikileaks

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